Por
Giress Guerra
En la música cristiana pesada, la escena
del metalcore es una de las más activas, según he podido apreciar. La cantidad
de bandas es impresionante y cada vez aparecen nuevos músicos con deseos de
comunicar verdades bíblicas usando este género. Hoy les presento a Then Its
End, una agrupación de Iowa, Estados Unidos. Se formó con la unión de distintos
músicos de bandas que se habían separado, así que no es descabellado pensar que
de aquí saldría algo bueno, y vaya que se cumplieron las expectativas.
Restored es su álbum debut y solo lo puedo
clasificar con 2 palabras: Puro Metalcore. Se trata de guitarras, bajos y
baterías a todo tren, sin efectos electrónicos ni teclados abundantes para
adornar la producción; esto llega al oyente de forma cruda y sin filtros. Pero
lo que destaca aquí es el equilibrio que logran entre caos y melodía. Cuando lo
escuches notarás como su ritmo es agresivo, directo, o sea, lo que se espera de
un subgénero del hardcore, pero ahí están las voces limpias y los segmentos más
pausados para "bajar la marcha", todo con un resultado espectacular.
Creo que de esta manera pueden llegar a un público más amplio y aclaro que las
bandas que tocan de esta forma son de mis favoritas dentro de este estilo.
Resumiendo, gran debut para Then Its End
con Restored. Equilibrio perfecto entre agresividad y melodía; voces guturales
y limpias. Coros con estructura conversacional, intercalando las dudas y
preocupaciones del autor (y también nuestras) con la confianza en el cuidado de
Dios con nosotros. Su lírica parece, según mi apreciación, inspirada en los
libros de Job y Eclesiastés, con esas preguntas sobre el sentido de la vida que
alguna vez nos hemos hecho. Totalmente recomendado si gustas del metalcore agresivo
pero al mismo tiempo melódico y con letras honestas con las que identificarse.
Then Its End comienza a lo grande y esperamos que llegue muy lejos.
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